porque cada uno de nosotros tiene su historia, y nunca nadie va a poder comprenderlas todas. somos diferentes, y por eso tenemos mérito cuando intentamos ayudar, confiar o simplemente escuchar. y a mi que me importa si cualquiera te ha insultado, y estás fatal? pues debería importarme. a mi y a todos. es difícil pero hay que meterse alguna vez en la piel del otro y parar ya de pensar que somos el centro del universo.tenemos entre 13 y 17 años, y aún no sabemos nada de la vida. sabremos cuando seamos mayores, incluso viejecitos diría yo. sabremos cuando hayamos estado en 50 países y hallamos visto a la gente que sufre, la la gente rica mimada y a los que pasan de la vida. entonces, y solo entonces tendremos derecho a decir que alomejor entendemos el problema que la otra persona me esta contando, porque ya me suena de algo aquella historia, que me la contaron hace quince años en un motel sin luz ni agua de Nueva Zelanda. hay que tener experiencias . asique vamos a salir del caparazón, que creo que ya va sie ndo hora y vallamos a explorar, sin que nadie nos pare los pies, porque no tienen derecho a quitarnos la libertad de crecer como personas
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